Entre castañares centenarios, bosques caducifolios y praderas muy verdes, en el corazón del Tirol del Sur, en Alto Adigio, se extiende la antigua senda de la Vía Romea Germánica: este camino, conocido como el Sentiero del Castagno, serpentea a la sombra de las Dolomitas y ofrece vistas interminables de cumbres y valles, castillos y abadías, granjas que ofrecen productos de kilómetro cero —¡perfectos para merendar!— y viñedos que conservan la génesis de algunos de los mejores vinos italianos.
A lo largo del Sentiero del Castagno también hay pueblos encantadores como Chiusa, cuna de poetas y artistas, y ciudades más grandes y renombradas como Bolzano, la puerta de entrada a las Dolomitas, con un animado centro y puestos de mercado que despiertan la imaginación y el apetito con crepes, postres caseros y salchichas con cerveza, perfectas para un refrescante descanso tras una caminata.
El Sentiero del Castagno es la ruta perfecta si te gusta la montaña pero viajas con la familia, o si quieres disfrutar de un itinerario menos exigente en las Dolomitas.











